El diputado provincial electo por La Libertad Avanza en Misiones, Diego Hartfield, encendió la polémica al cuestionar los históricos programas de incentivo al consumo conocidos como “Ahora”.
Lo hizo a través de un posteo en la red X (ex Twitter), donde recomendó el libro La economía en una lección, de Henry Hazlitt, y señaló: “Los planes Ahora son muy cuestionables, generan un beneficio en el corto plazo y tienen muchísimos costos indirectos. Ojalá podamos tener una discusión sana y madura sobre este tema. Pero está bueno arrancar leyendo este broli”.
Sus declaraciones se suman a una línea crítica dentro del espacio libertario, que rechaza las intervenciones del Estado en la economía, incluso en casos como este, donde hay articulación público-privada con comercios y bancos.
Recomiendo fuertemente leer este libro a todos, sobre todo a los misioneros.
Los planes Ahora son muy cuestionables, generan un beneficio en el corto plazo y tiene muchísimos costos indirectos. Ojalá podamos tener una discusión sana y madura sobre este tema. Pero está bueno… https://t.co/Zo5b7FjzbI— Diego Hartfield (@Diego_Hartfield) June 29, 2025
Respuesta a Hartfield: “Esto no es obligatorio, es una herramienta que funciona”
La respuesta no tardó en llegar. En el programa Realidad Mixta de Radio Up, el expresidente de la Confederación Económica de Misiones (CEM), Alejandro Haene, defendió la vigencia del programa y subrayó su carácter voluntario: “Nadie obliga a nadie a entrar. El comerciante que quiere participar lo hace sabiendo los márgenes y condiciones. Y los consumidores deciden usarlo porque les conviene”.
Haene reconoció que todo esquema es mejorable, pero rechazó el planteo de desmantelarlo por completo: “Decir que hay que terminar con los planes Ahora es como decir que hay que tirar abajo la torre de Pisa porque está inclinada. Mejor tratemos de enderezarla”.

Tres patas… y una cuarta: el rol del consumidor
El dirigente empresario destacó que los programas se sostienen gracias a un acuerdo tripartito entre el gobierno provincial, los bancos y los comercios, pero remarcó que la pata fundamental es la del consumidor.
“En un contexto inflacionario donde pagar en 6, 12 o 18 cuotas sin interés era un alivio, el programa fue clave para sostener el consumo. Hoy se mira con otros ojos porque la inflación bajó, pero el valor sigue estando”, afirmó.

Limitaciones estructurales y ejemplo regional
Haene recordó que el programa “Ahora” lleva 9 años en vigencia y que Misiones logró implementarlo sin contar con un banco provincial, como sí tiene Buenos Aires. En su lugar, se apoya en el Banco Macro, agente financiero de la provincia.
También remarcó que otras provincias intentaron replicarlo sin éxito: “Por algo muchos lo intentaron copiar, pero no pudieron. Ni Corrientes, ni Chaco lograron algo similar”.
Lejos de cerrar el debate, el dirigente propuso una mirada amplia: “Yo soy defensor del programa, pero también soy open mind. Todo se puede mejorar, pero no hay que irse a los extremos. Hay grises y hay que saber interpretarlos”.
Y concluyó con un llamado a incluir a los consumidores en la discusión: “A ellos también habría que preguntarles si lo quieren seguir usando”.