En la noche del domingo, cerca de las 22, un nuevo femicidio sacudió a la comunidad misionera. Claudia Soledad Batista, de 28 años, fue asesinada a machetazos por -se presume- su ex pareja en su domicilio del barrio La Tablada, en la localidad de San José. La víctima, madre de cinco hijos menores de edad, había vivido toda su vida en Leandro N. Alem, pero hace algunos meses se había mudado junto a su agresor.
El hecho conmocionó a toda la comunidad, que aún no puede asimilar el crimen. El principal y único sospechoso es Gabriel C., de 25 años, quien fue detenido por la Policía y se encuentra alojado en la comisaría Segunda de San José, a disposición del Juzgado de Instrucción Cuatro de Apóstoles, cuyo titular es el juez Miguel Ángel Faría.
Según relataron familiares, Claudia vivía una situación de violencia constante con su ex pareja, con quien tenía dos hijos en común. Aunque ya estaban separados, él seguía acosándola. La joven había llegado a denunciarlo, pero luego retiró la denuncia por temor, ya que él la amenazaba con suicidarse.
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Detrás del femicidio, antecedentes de violencia de género
“Queremos que haya justicia. Nadie nos va a devolver a nuestra hermana, pero vamos a pedir fortaleza a Dios para acompañar a sus hijos. No los vamos a abandonar”, declaró una de las hermanas de la víctima, visiblemente afectada. La familia también aclaró que Claudia tenía 28 años y no 40, como fue informado inicialmente por la Policía.
La noche del crimen, Gabriel C. llegó a la vivienda acompañado de otro hombre y comenzó a beber. Minutos después, y sin provocación aparente, atacó a Claudia con un machete. La agresión fue tan brutal que desfiguró completamente el rostro de la joven madre.
“Ella quedó desfigurada. Le destrozó la cabeza de un machetazo”, dijo con angustia una de sus hermanas. Además, mencionó que Claudia había compartido horas antes algunos estados en WhatsApp que sonaban como despedidas, lo que hace pensar que ya temía por su vida.
El destino de los hijos
En medio del profundo dolor, la familia Batista también enfrenta otra preocupación: el destino de los cinco hijos de Claudia. Actualmente están bajo el cuidado de la familia paterna, algo que los allegados de la víctima consideran inapropiado. “Queremos que los chicos estén con nosotros. Entre todos los vamos a acompañar, no los vamos a dejar solos”, reclamaron.
Este caso se suma a una lista negra que ya contabiliza cuatro femicidios en lo que va del año en la provincia de Misiones, reflejando una preocupante escalada de violencia de género. La comunidad exige respuestas concretas y justicia para evitar que más mujeres sigan siendo víctimas de un sistema que muchas veces no las protege.
Organizaciones feministas y de derechos humanos ya están convocando a una marcha para exigir justicia por Claudia Batista, visibilizar su historia y reforzar el reclamo por políticas públicas efectivas contra la violencia machista.
