Como es de común conocimiento, su Santidad el Papa Francisco ha fallecido, un Papa disruptivo, vanguardista, pero sobre todas las cosas, fue el Papa que le mostró a gran parte de las altas esferas del catolicismo que se puede vivir una vida de austeridad, así como también se puede predicar desde la humildad y la empatía.
Proveniente de la Orden Jesuita, fundada en el siglo XVI por San Ignacio de Loyola, supo darle su impronta a un Vaticano que al momento de su asunción, se encontraba envuelto en diversas polémicas. Los Jesuitas se caracterizan por ser disruptivos, no en vano fueron los primeros en construir misiones en un continente americano recientemente conquistado. Gracias a su presencia, los pocos grupos aborígenes que aun quedaban, contaron con un ápice de protección, así como también fueron educados y evangelizados. Tambien conocidos como la Compañía de Jesus, introdujeron un sistema educativo conocido como el Trivium y el Quadrivium; el Trivium contaba con 3 partes (gramática, lógica y retórica) y el Quadrivium de 4 partes (aritmética, geometría, música y astronomía), a través de este sistema y readecuado a la lengua guaraní, los Jesuitas marcaron un antes y un después en America, la impronta fue tal que hasta los Reyes de España se sintieron amenazados, tanto así que terminaron expulsando a la Orden del continente, de poco sirvió ya que hasta nuestros días las antiguas construcciones perduran en diferentes regiones de América.
Volviendo a nuestros días, Francisco supo plasmar mientras pudo, los ideales jesuitas, su papado iluminó a propios y extraños, llegando a los rincones mas recónditos del planeta. Tampoco le escapó a temáticas muy polémicas para la iglesia, cuando hablo sobre la comunidad gay, de los casos de pedofilia que involucraban a miembros del clero, no le escapó a la polémica y tuvo la personalidad necesaria para afrontar criticas que fueron creciendo a medida que avanzaba su papado.
La danza de nombres para reemplazar a Francisco ya ha comenzado, el conclave iniciará en unos días, y es aquí donde comienza una de las disputas de poder mas grandes y silenciosas del mundo. Y como es de costumbre, las aguas se dividen entre conservadores y progresistas. El sector mas conservador buscará deshacer obras y silenciar declaraciones del fallecido Sumo Pontífice, mientras que el ala mas progresista buscará mantener el legado de Francisco, e ir más allá de lo que su Santidad ha podido llegar. Como pueden ver, hay numerosos intereses de por medio.
Sin lugar a dudas, una de las características mas pronunciadas de la Iglesia Católica es, fue y será el hermetismo que acompaña sus pasos, el Conclave no será la excepción ya que los Cardenales mas poderosos del mundo que decidirán quien será el sucesor de Francisco, estarán incomunicados y por unos días, estarán abocados en la mencionada misión. A partir de aquí, solo tenemos una certeza, ya que la próxima vez que el humo blanco emane de la chimenea ubicada en la Capilla Sixtina, el nuevo Papa será el encargado de marcar el camino a seguir por el mundo católico.