El presidente del partido Por la Vida y Los Valores de Misiones, Walter Ríos, confirmó públicamente la ruptura del espacio con el diputado provincial electo Ramón Amarilla, a quien acusó de desagradecido y de actuar por fuera del alineamiento partidario. “Me siento -como presidente del partido- decepcionado de él por la forma que nos trató. Una falta de respeto total”, sentenció en los estudios de Radio Up, durante el programa “Arriba la Radio”.
Según Ríos, Amarilla “nunca fue afiliado” al partido y su inclusión como primer candidato se dio por una propuesta del diputado del PRO, Miguel Núñez. “Él fue el que se acercó a nosotros y nos trajo la propuesta para que él sea candidato en nuestra lista”, explicó.
Dinero, empresarios y expulsiones
Uno de los ejes más graves de la denuncia fue el intento del entorno de Amarilla de financiar su campaña sin autorización partidaria: “Estaban solicitando fondos a nombre del partido para la campaña sin que las autoridades partidarias tuvieran conocimiento alguno”, denunció Ríos.
El legislador electo detalló que, ante su pedido de formalizar la solicitud a través de un acta de la comisión directiva, recibió una respuesta tajante: “No, no, no. Ustedes no van a ver un peso, eso lo vamos a manejar nosotros”. Según afirmó, se trataba de una suma “de entre 20 y 25 millones” que estaban pidiendo “a empresarios, sí. Y era mucha plata”.
Este hecho, sumado a otros conflictos, derivó en una asamblea extraordinaria y la decisión de expulsar a todo ese grupo de la lista. “Toda la lista era prácticamente de ellos y eso fue lo que generó un malestar interno”, reconoció Ríos.

Un candidato sin campaña
El presidente de Por la Vida y los Valores cuestionó duramente el compromiso de Amarilla durante el proceso electoral. “Él ocupó un lugar en la lista donde no puso un centavo, nunca caminó en las calles para repartir un voto”, sostuvo. “Los videos que hizo desde el penal fueron contados”, agregó en Radio Up.
Frente a la polémica por los resultados obtenidos, Ríos subrayó que el esfuerzo fue del aparato partidario: “Nosotros hicimos muchos viajes al interior llevando los votos a diferentes municipios. Hay que tener en cuenta que si los votos no llegaban a esas mesas, hoy las elecciones no se ganaban”, advirtió.
Un desconocimiento en público
El punto de quiebre, según relató Ríos, se dio tras la excarcelación de Amarilla. “Fuimos hasta el penal para recibirlo”, dijo, pero “en la caravana, ni siquiera nos saludó”. La tensión escaló durante el acto posterior en la plaza 9 de Julio. Lo llamó una candidata del partido y le dijo: ‘Acá está el presidente del partido’, me mira a mí, mira a la apoderada, mira a los otros candidatos que están atrás mío. Y se dio vuelta y siguió hablando como que nosotros no estábamos”. Río, entonces, fue tajante: “Dije, ‘Me voy’. Donde no me llaman, no tengo que estar”.
Ríos fue directo al afirmar que la candidatura de Amarilla le permitió recuperar la libertad: “Hace cinco meses atrás, en enero 2025, febrero 2025, ¿quién hablaba de Amarilla en la provincia? Nadie”.
“Cuando el partido levanta la bandera con el nombre de él, que va a ser candidato, ahí fue el boom en los medios de prensa: ¿cómo puede ser que un preso sea candidato a diputado?”, recordó. “Si él no hubiese estado en la lista, estaría preso”, sentenció.

Sin vínculos con la Renovación
El titular del partido también desmintió cualquier tipo de acuerdo con el oficialismo provincial. “Nunca lo conocí personalmente a Rovira”, afirmó. “Siempre nos mantuvimos en la vereda de enfrente como un partido opositor. Participamos solos, sin ninguna alianza con ningún otro partido”.
Aunque evitó confirmar si impugnarán la banca de Amarilla, Ríos dejó el claro la crisis de pertenencia del exsuboficial de la Policía con el partido que lo llevó de candidato: “Ha hecho entrevistas en diferentes lados donde nos criticó, ha levantado la bandera o el nombre del partido en diferentes municipios… ya no es un acto proselitista, ya la campaña electoral ya pasó”, advirtió Rios.
Te dejamos la entrevista completa con Walter Rios: