“Todo para los pequeños que son los que más solos están en esta sociedad y necesitan un acompañamiento integral”, dijo Neni Valdez, referente de la Fundación Tupá Rendá, que este viernes y sábado vuelve a organizar la feria mensual de usados Ñemú Porá, en el salón comunitario de la Capilla San Rafael de Posadas. Será este viernes de 15 a 19 y el sábado de 10 a 18.
El evento tiene un objetivo claro: recaudar fondos para mantener los hogares que alojan a niños y niñas sin cuidados familiares, cubriendo necesidades básicas, médicas y urgencias edilicias. “Todo lo que vendemos es para sostener a los chicos, porque son los que más necesitan”, insistió Neni.
En esta edición, se podrán conseguir una heladera ($100.000), un horno de pared ($300.000) y un televisor plano ($50.000), todos en perfecto estado. También habrá ropa de abrigo, calzado infantil, ropa de cama y prendas para todas las edades a precios accesibles, con opciones desde $2.000. “Hay mucha ropa de criatura, muchas donaciones esta vez”, destacó.
Tupá Rendá y un compromiso con la solidaridad
Además de ser una feria solidaria, Neni subraya su valor como economía circular: “El que dona gana porque libera espacio; el que compra accede a productos a buen precio; y nosotros, con los fondos, sostenemos a los chicos”.
Actualmente, la Fundación aloja a 19 niños y niñas, con cupo prácticamente completo, repartidos entre dos casas alquiladas. Sin embargo, el mantenimiento de estas viviendas es un desafío constante. “Las casas son viejas y se deterioran mucho. Ya hicimos una nueva conexión de agua y ahora tenemos que encarar la parte eléctrica”, explicó.
Una de las necesidades urgentes es conseguir dos roperos grandes para el hogar donde viven los varones. “Los placares de la casa anterior no se pudieron reutilizar. Consultamos con varios carpinteros, pero los presupuestos fueron imposibles. Uno nos pasó 2 millones ochocientos”, reveló. Ahora esperan la respuesta de un nuevo carpintero que ofreció una opción más accesible.
En cuanto al día a día de los chicos, todos están escolarizados. Asisten a tres escuelas distintas, algunos a la Escuela Especial N.º 4. “Necesitan tratamientos de fonoaudiología y psicología con frecuencia semanal, porque los turnos del sistema público son cada dos meses. Por eso apelamos a servicios particulares”, lamentó.
Los artículos de higiene personal también son una necesidad constante: shampoo, acondicionador, crema dental y desodorantes se consumen a diario y no siempre alcanzan.
Leé también: Cifras que duelen: 52,7% de los niños son pobres en Argentina
A pesar de las dificultades, Neni no baja los brazos: “Vamos superando en el día a día. Es la providencia, siempre aparecen los problemas, pero también aparece la energía para enfrentarlos”.
Quienes quieran colaborar pueden comunicarse con la Fundación. “Hacemos primero una entrevista, explicamos la situación y cada uno se suma según su capacidad”, concluyó.
Aunque bajó la pobreza infantil, el 52,7% de los niños en Argentina sigue siendo pobre, alerta UNICEF; persisten fuertes desigualdades por educación, empleo y vivienda. https://t.co/9Sf1QAr1qq
— RadioUp (@radioup955) July 11, 2025