El sacerdote Alberto Barros, vicepresidente de Cáritas de la diócesis de Posadas y párroco de la Sagrada Familia, cuestionó con severidad al presidente Javier Milei por sus recientes declaraciones contra la justicia social. En el programa “Arriba la radio” de Radio Up, el referente eclesiástico expresó su consternación ante lo que considera un intento de deslegitimar una de las bases de la doctrina cristiana.
“Escuchando lo que dijo el presidente en Chaco, no me sorprende, porque ya en campaña decía barbaridades. Pero que lo siga repitiendo, y que sea aplaudido, es alarmante”, sostuvo Barros.

Según el sacerdote, calificar a la justicia social como un robo o un pecado es “una barbaridad teológica” que demuestra “ignorancia y crueldad”. Aseguró que, lejos de ser algo negativo, se trata de un principio profundamente enraizado en la enseñanza de Jesús.
“La justicia social implica fraternidad, solidaridad, preocupación por el que sufre. No es un pecado, es una virtud. Lo que es inhumano es la injusticia, lo que es cruel es desentenderse del que sufre”, subrayó.

“Milei tergiversa el mensaje de Jesús”
Durante su intervención en el programa radial, Barros señaló que el presidente “distorsiona absolutamente lo que es el cristianismo” y citó varios ejemplos bíblicos para sostener su postura: “Jesús dijo: felices los que tienen hambre y sed de justicia. Contó la parábola del rico indiferente que despreciaba al pobre. Toda su enseñanza es clara: hay que compartir, cuidar, amar al otro. El mensaje de Jesús es preferencial hacia los pobres y los últimos”.
También apuntó al intento del presidente de usar el lenguaje religioso para desacreditar la justicia social. “Dijo que es un virus que se metió en la cabeza de la gente. ¿Cómo puede decir eso? El virus es el desprecio, el desinterés por el que sufre, por los jubilados, por los niños enfermos, por los hospitales desfinanciados. Eso sí es una enfermedad del corazón”, remarcó.

Un modelo económico que “no es humano ni cristiano”
Barros fue enfático al afirmar que el modelo político y económico que impulsa el gobierno nacional es “incompatible con el Evangelio y con el humanismo”. “Desde que fue electo advertimos que este gobierno es cruel, inhumano y anticristiano. No es una opinión partidaria, es una mirada basada en la fe y en la doctrina social de la Iglesia”, explicó.
Criticó también la concentración de poder, el desmantelamiento del Estado, la entrega de recursos naturales y la política exterior, incluyendo la cuestión de Malvinas y Tierra del Fuego. “Estamos ante un gobierno que actúa en función de intereses económicos y extranjeros, y que cada vez es más autoritario. Es preocupante para la paz social y la convivencia”, dijo.

Llamado a la reflexión dentro de la Iglesia
El sacerdote no evitó una autocrítica hacia algunos sectores eclesiásticos que acompañan el discurso oficial: “Dentro de la Iglesia también hay sectores que aplauden esta crueldad. Pero ese catolicismo no es verdadero. Hay que hacer un examen de conciencia muy serio”.
Barros recordó que la Iglesia lleva más de dos mil años promoviendo la justicia social y que documentos como el Compendio de la Doctrina Social de Juan Pablo II son claros en cuanto al rol del cristianismo en la construcción de una sociedad más justa. “La justicia social no la inventó ningún partido político. La promovió Jesús. Habla de dignidad, de acceso a los derechos básicos, de ayudar a los que menos tienen. Es compasión, solidaridad, amor al prójimo”.
Te dejamos la entrevista completa: